El Rapid Prototyping, también conocido como fabricación aditiva o impresión 3D, es un proceso de fabricación por adición de material capa a capa que se usa para la la obtención de prototipos rápidos. Esta tecnología controlada por ordenador permite fabricar piezas plásticas, metálicas o cerámicas, en algunos casos con propiedades mecánicas muy similares a los plásticos técnicos.
La construcción de un modelo con métodos tradicionales puede implicar de algunas horas a varios días o semanas de trabajo, dependiendo del método utilizado y de la medida y la complejidad del modelo. Por el contrario, los sistemas de prototipado rápido pueden producir modelos en pocas horas, aunque esto puede variar ampliamente dependiente del tipo de máquina que se utiliza y la medida y número de modelos que se producen simultáneamente.
Finalmente, la interfaz de datos estándar entre los programas de CAD y las máquinas es el formato de fichero STL. Un archivo de STL se aproxima a la forma de una pieza o conjunto con facetas triangulares. Cuanto más pequeñas sean las facetas mayor será la calidad de la superficie. Otros archivos de trabajo válidos son IGS o STEP.
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